jueves, 17 de noviembre de 2022

Agricultura tradicional majorera

El campo majorero, sus gavias y nateros, paredes y cercas, caños y atarjeas, aljibes, estanques y cisternas formaban un todo como unidad de producción y subsistencia. Los animales de labor como burros, camellos (dromedarios) o bueyes, fueron utilizados por el campesino de Fuerteventura hasta la década de 1970. Lo que hoy queda de yuntas son meramente testimoniales de un pasado agrícola que cedió al empuje de la terciarización de la economía y la apuesta por el turismo y los servicios. Nuestra isla "se vació" desde aquel eclipse de 1959 en que, pese a la parafernalia institucional desplegada, no pudo verse desde Jandía, lugar que se vendió como ideal para la observación.
Casillas del Ángel 1966, la agricultura tradicional persistía en el uso de yuntas mixtas. Están sembrando, ambos, mujer y hombre, volcados en la tareas agrícolas con el telón de fondo de Montaña del Campo. [Publicada por Biblioteca Municipal de Puerto del Rosario]



Tomé esta foto en El Time (Puerto del Rosario), donde siguen sembrando a la vieja usanza, con yunta de burros majoreros.

La arquitectura del cine en Fuerteventura

En la isla se construyeron muy pocos edificios destinados exclusivamente a proyectar películas, a la comercialización de los productos de la industria del cine, al menos hasta la década de 1980.
Hasta entonces solo se llegó a la adaptación de locales, como el caso del almacén de Agustín Pérez Rodríguez, en la calle León y Castillo, esquina a Secundino Alonso; allí se levantó una cabina de proyección en alto, a la derecha de la entrada, y la pantalla o tela se ubicó al fondo (unos veinte metros de largo por unos 7 de ancho). Sería en las décadas de 1930-1940. Algunos lo recordarán como "Cine del Cura".
Con anterioridad el cine había llegado a los locales de la Sociedad El Porvenir cuando ésta se ubicaba en su sede de Calle Fernández Castañeyra donde, además se presentaban obritas de teatro, audiciones musicales, conferencias y tertulias desde fines del XIX.
Andando en el tiempo, desde la década de 1950, los Hermanos Martínez Soto, pusieron en funcionamiento la sala Cine Marga, que sirvió de espacio escénico para el teatro de la capital majorera hasta la década de 1980. Casi coincidiendo en el momento, acaso un poco más tarde, Los Perdomo pusieron crearon otro espacio arquitectónico para el Cine en Gran Tarajal. Ambas salas hoy están destinadas a otros usos.

La arquitectura del cine llegó a Puerto de Cabras mediada la década de 1950. Esta es la fachada del proyecto que promovían los hermanos Martínez Soto para sustituir una insuficiente sala de proyección del cura. La nueva sala ya estaba en obras en mayo de 1956 y que abriría sus puertas bajo el nombre de Cine Marga (recordatorio del padre de los promotores, Casto MARtínez GAllego)...

En la actualidad, la fachada del viejo cine Marga sirve de pórtico al Centro de Arte Juan Ismael, regentado por el Cabildo de Fuerteventura, y nos recuerda que fue el centro de buena parte de la vida de Puerto del Rosario durante más de veinte años. Tal vez alguien, algún día, lleve a las salas del nuevo centro una exposición que, por ejemplo, recuerde las vicisitudes constructivas del antiguo cine, la explotación industrial, la maquinaria, las labores sociales allí desarrolladas, el teatro, la música, etc. que allí se desarrolló hasta fines de la década de 1970. La fotografía de cuanto insinuamos es un reto a la institución propietaria del centro que nos ocupa.

La arquitectura del cine tuvo en Fuerteventura otro ejemplo en Gran Tarajal, donde aún se conserva este ejemplar reconvertido para otros usos, como el de vivienda [foto publicada por J. A. Sierra].

martes, 15 de noviembre de 2022

Hornos de Cal de La Hondura

 Otro de los grandes ejemplos de la arquitectura industrial de Fuerteventura y de Puerto del Rosario en particular, se encuentra en La Hondura, junto al camino viejo a Puerto Lajas. Se trata de un complejo fabril para la cocción de calizas y fabricación de cal. Lo explotó Bordón y Morales, en su frente marítimo fondearon veleros como el Delfín o El Rosario, de la sociedad Morales y Chacón, para cargar cal en sacos y piedras en la década de 1920, si bien con los primeros camiones el embarque comenzó a realizarse por los muelles de la cercana ensenada de Cabras.

Fue restaurado en la década de 1990, siendo concejal de cultura en el ayuntamiento de Puerto del Rosario don José Manuel Lima Barrios. Hoy debería estar catalogado e incorporado al patrimonio histórico del municipio y de la isla.

Complejo industrial hornos de cal de La Hondura, de don Juan Antonio Bordón Melián, el litoral  de Puerto del Rosario, camino de Puerto Lajas. [Foto aportada por Paco Cerdeña]

lunes, 14 de noviembre de 2022

Huellas de los Miller de Puerto de Cabras

 En el mismo centro de Puerto de Cabras, donde hoy se ubica la Casa Consistorial de Puerto del Rosario, estuvo la vieja mansión de Diego o James Miller, una de las muchas propiedades inmobiliarias que aquí tuvo este legendario personaje.


Desde la Plaza de España, en la curva de la Calle Téofilo Martínez de Escobar, contemplamos este viejo edificio del Puerto, que albergó a la Sociedad Centro de Artesanos, en una esquina y, en la otra la escuela de Santiago Yus Calvo (Cabecita de Ajo). En medio el portón de acceso a viviendas, en una de la cuales funcionó -¡quien lo iba a decir en tiempos de racionamiento! una fábrica de soda y embotelladora de agua mineralizada. Fue demolido en la década de 1960 para construir el Centro Cívico de la ciudad, donde se asentó el Juzgado, Correos y Telégrafos y la Casa Consistorial o Ayuntamiento.

La Plaza de España en Puerto de Cabras (1939- década de 1970)

 


La foto capta un momento de la década de 1960: Una infraestructura viaria que se dirige al muelle que contempla las operaciones del correo Ciudad de Huesca o de Mahón, de la Compañía Transmediterránea. A ambos lados nos encontramos edificaciones singulares de nuestro patrimonio -algunas desaparecidas-, como la Plaza de España, inciada tras la Guerra Civil, en 1939; a la izquierda junto a una pequeña alameda o jardin, la casa del telégrafo y, más abajo, la casa Manrique que ocupara en su etapa final el Unión Puerto; y, por fín, a la derecha, el mercado municipal en cuyo diseño intervino Ceferino Erdozain Felipe, siendo inaugurado en 1963 por el Gobernador Civil y Jefe Provincial del Movimiento, Honorato Martín-Cobos Lagüera.


El mercado municipal de Puerto del Rosario, en marzo de 2012. [Foto Paco Cerdeña].

Primer Parador de Turismo de Fuerteventura

 

En el entonces Puerto de Cabras se realizó este primer parador con el nombre de "Hotel Fuerteventura" y  diseño del arquitecto José Enrique Marrero Regalado para el Mando Económico de Canarias (1941-1946), concebido a modo de vivienda terrera. Al fondo los cuarteles militares, otro de los proyectos de aquel Mando en Fuerteventura. El hotel sufrió una amplia remodelación en la década de 1960, por el Cabildo de Fuerteventura, añadiéndosele una segunda planta; y desde entonces fue, además de hotel, hogar de menores y hoy alberga oficianas de Turismo. [Imagen publicada en el libro Puerto de Cabras/Puerto del Rosario. Una Ciudad Joven, 1995].


Así quedó la obra de José Enrique Marrero Regalado tras la remodelación de la década de 1960, que desdibujó por completo el diseño original de aquel arquitecto. [La foto se publicó en libro Puerto de Cabras Puerto del Rosario, una ciudad Joven, 1995].


Y este es el edificio en 2011, sede de oficinas de la Consejería de Turismo del Cabildo Insular. Tomamos la foto desde la entrada al muelle comercial de la capital majorera, y en ella vemos la rotonda que organiza el tráfico en esta parte de la ciudad, con lo viejos norays y la escultura "El vigía", de Feliciano G.Hernández. [Foto aportada por Paco Cerdeña]

Arquitectura del viento

 

Molinos de viento para la molturación de granos, en Llanos de la Concepción. En primer plano uno de seis aspas; al fondo, el de Nemesio es de cuatro. En medio el edificio de ancha puerta que sirvió de base a una molina actualmente desmantelada. Los dos que aún siguen en pié gozan de la protección que les confiere su declaración como Bienes de Interés Cultural. [Foto de Francisco J. Cerdeña Armas].


En esta otra secuencia sobre los molinos de Los Llanos de la Concepción, se ofrece otra perspectiva incorporando un primer plano con un horno de cal, indicativo de la apuesta de los vecinos de la zona por la industria: primero la molturación de granos, después la quema de piedra de cal para la exportación (década de 1950). El molino de Nemesio seguía armado a mediados del siglo XX, mientras que la molina aparece ya desmantelada, conservando sólo la torre. En todo caso puede apreciarse que entre ambas instantáneas el patrimonio se diluyó parcialmente. [La primera imagen la publicó Pedro C. Quintana Andrés, la segunda es mía y la tome en abril de 2011].