Esta zona de la ciudad de Puerto del Rosario llevó en otro tiempo el nombre de "Hoya del Inglés" y "Playa del Inglés", en alusión a Diego Miller, uno de los primeros pobladores de Puerto de Cabras.
Aquí se construyeron, a principios del siglo XX, hornos para la fabricación de cal y almacenes para su exportación por la caleta cercana cuando el tiempo lo permitía y se quería eludir el pago de arbitrios...
Cuando la recaudación se perfeccionó y el Cabildo asumió para sí el cobro de los gravámenes a la importación y exportación, los sacos de cal que fatigosamente se embarcaban por aquella caleta, dieron paso a los carros y camiones que arrastraron la producción de los hornos hasta los muelles de la localidad.
En la zona se conserva una de aquellas fábricas de cal como recuerdo a un capítulo de la historia económica de la ciudad, especialmente significativo en los años 10, 40 y 50 del pasado siglo XX...